La sucesión de Axel Kicillof, una disputa que crece en el peronismo cada vez más acéfalo
Se mueve el peronismo. En la provincia de Buenos Aires el actual gobernador atraviesa su último periodo de gestión. Ricardo Quintela suma apoyos en el PJ nacional.
Ya en su segundo mandato y sin una nueva reelección, la sucesión de Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires moviliza al peronismo de cara a las elecciones de medio término. Con Máximo Kirchner de salida como jefe del PJ bonaerense, La Cámpora, los intendentes y el massismo se enfocan en el principal distrito electoral del país, uno de los pocos que logró retener el PJ luego de la llegada de Javier Milei a la presidencia.
El primer test electoral serán las legislativas del próximo año. En la provincia de Buenos Aires existe una disputa por la lapicera para el armado de listas del próximo año. Cristina Fernández de Kirchner es la jefa política de Kicillof y tendrá un rol fundamental en la confección de la boleta. Quien encabece la lista de candidatos a diputados nacionales en 2024 quedará posicionado como eventual sucesor de Kicillof al frente de la gobernación bonaerense. Pero los candidatos son muchos.
Sergio Massa tenía en planes reaparecer este sábado en Sierra de la Ventana para reunir a la mesa provincial del Frente Renovador. El miércoles por la noche el tigrense decidió suspender del acto para no volver al ruedo en medio del escándalo judicial que acorrala a Alberto Fernández. El excandidato presidencial empuja la ampliación del panperonismo para formar un frente anti Milei mas allá de las fronteras del kirchnerismo. Dialoga con intendentes peronistas, con gobernadores y legisladores pero también con Horacio Rodríguez Larreta, alejado del epicentro de toma de decisiones del PRO ahora bajo la jefatura formal de Mauricio Macri.
Los intendentes del conurbado valoran el esfuerzo que hizo Massa al asumir el cargo de ministro de Economía en el peor momento de la gestión de Alberto Fernández. Y lo tantean como posible prenda de unidad de las distintas tribus del PJ para encabezar la boleta el próximo año. Massa aún no tomó ninguna definición y evalúa la propuesta de los jefes comunales de entrar eventualmente en la línea sucesoria para afrontar un escenario de descomposición del gobierno de Javier Milei.
La Cámpora intenta expandirse
Cristina y La Cámpora se encuentran, en la provincia de Buenos Aires, en una fase de expansión. La agrupación de Máximo Kirchner domina 12 municipios y va por más. La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, asoma como candidata de este sector para la sucesión de Kicillof. Una disputa que, de no mediar acuerdo, deberá saldarse en las PASO siempre y cuando no emerja una reforma electoral que fulmine las primarias abiertas y obligatorias antes del 2025.
“Más allá de los liderazgos de gestión de Kicillof y de Ricardo Quintela, no hay jefes en el peronismo. Cualquiera puede ser candidato a cualquier cosa”, avisa un barón del conurbado ante la consulta de Ámbito. Es que son varios los jefes comunales que no descartan pelear por la gobernación. Desde Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), pasando por Gustavo Menéndez (Merlo) y también Federico Achaval (Pilar). Se trata de intendentes que preservan la unidad del peronismo con puentes aceitados tanto con La Cámpora como con Kicillof y Massa. El peronsimo ecuménico y pragmático de los municipios.
El rival de Máximo Kirchner
Alejado de este polo dialoguista del peronismo, emerge otro intendente PJ, Fernando Gray (Esteban Echeverría). Fue el primer opositor a la conducción del PJ bonaerense de Máximo Kirchner y es un histórico rival de La Cámpora en el conurbano. Gray impulsa una renovación junto a Juan Zabaleta, una figura cuestionada por por el kirchnerismo por su zigzagueo dentro del peronismo. Este grupo mantiene además una terminal en Córdoba con Martín Llaryora y con Juan Schiaretti, quien evalúa mudar su domicilio a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para competir por una banca de senador nacional.
Sin embargo, Kicillof ya tiene un preferido para su sucesión. Se trata de Carlos Bianco, su jefe de gabinete, amigo y funcionario de mayor confianza. Bianco había sido degradado al cargo de asesor cuando Martín Insaurralde desembarcó como jefe de gabinete bonaerense luego de la derrota electoral del peronismo en las legislativas 2021. En su segundo mandato como gobernador, Kicillof volvió a entronar a Bianco como jefe de gabinete y eventual candidato a gobernador de Buenos Aires en 2025. Deberá superar el veto de Cristina Fernández de Kirchner en medio de la disputa sorda de Kicillof y Bianco con Máximo.
La disputa bonaerense dependerá también de la evolución del vínculo entre Cristina y Kicillof. Se suma otro actor, de proyección nacional, como Ricardo Quintela. El gobernador de La Rioja recibirá este viernes a Kicillof para exhibir un nuevo peronismo en la jura de la Constitución provincial. Pero Kicillof no será el único invitado. Mañana el mandatario norteño, que ya suma apoyos ara presidir el PJ nacional, también será el anfitrión de la Federación Argentina de Municipios.